martes, 24 de noviembre de 2009

religion


Los vikingos tenían tres deidades principales: Odín, Thor y Freyr. Odín (O Wotan/Wodanaz en los pueblos germanos), jefe de todos los dioses, que gobierna en Asgard (residencia de los aesir), dios de la sabiduría, de la poesía, de la música, de los muertos en combate, es el más poderoso de los dioses vikingos. Su representación más habitual es la de un guerrero equipado para el combate, con una lanza (de nombre Gungnir) como arma. Su ojo izquierdo está hueco (Lo sacrificó para conseguir la sabiduría de las runas) y le flanquean dos cuervos: Hugin (Pensamiento) y Munin (Memoria) y dos lobos llamados Geri y Freki. Odín también posee un corcel de batalla, llamado Sleipnir, el cual tiene ocho patas. Ayudantes de Odín y las portadoras de la victoria son las valkirias, quienes cabalgan con Odín en la batalla y recogen a los valerosos guerreros que cayeron con honor en combate y los llevan a Valhalla, el salón de los guerreros.

Thor (O Donar en los pueblos germanos) es el dios del trueno, el hijo de Odín. Si los caudillos y los guerreros honran a Odín, a Thor le adoran los campesinos y la gente llana, que depende del trueno y de las lluvias y de que los temporales se apiaden de sus cosechas. Thor es un dios impetuoso, de naturaleza violenta y raramente reflexivo. De cabellos y barba rojos, lo más destacado de él es su fuerza, representada por Mjöllnir, su martillo, que descarga en forma de rayo mientras provoca un gran estruendo. La actividad preferida de Thor es la caza de trolls o la caza de gigantes. Según los vikingos, en los lugares más inhóspitos viven trolls, gigantes y otros enemigos declarados de los hombres. Thor es su principal enemigo y, siempre protector de la humanidad, viaja a menudo a Jotunheim para darles caza.

Freyr es el dios de la fertilidad y de la naturaleza. Pese a ser el tercer dios en importancia de los vikingos, no es de la familia de los Aesir, sino de otra familia de dioses, los Vanir. Freyr y su hermana Freyja son gemelos y todas las cosas que crecen lo hacen gracias a ellos.

Otros dioses de importancia en la mitología vikinga son:


Frigg: esposa de Odín. Es el prototipo de perfecta esposa y adorada por las amas del hogar.

Sif: esposa de Thor. De preciosa cabellera rubia, perdió sus cabellos por una travesura de Loki.

Tyr: Dios de la guerra, un sacrificio en honor suyo precedía al inicio de la Thing, la reunión socio-jurídica de los vikingos. Perdió su mano en las fauces del lobo Fenrir.

Baldr: el más bello y amado de los dioses, hijo de Odín y Frigg.

Njörðr: el padre de los Vanir, es el dios del mar y de los pescadores. Sus hijos son Freyr y Freyja.

Heimdall: dios de la Luz y enemigo de Loki.

Freyja: diosa del amor, hermana de Freyr.

Höðr: el dios ciego. Por su mano cometerá Loki su penúltima fechoría, el asesinato de Baldr.

Mimir: el dios de la sabiduría, es consejero de Odín. Es el guardián del Pozo del Conocimiento, y permitió a Odín beber de él a cambio del sacrificio de su ojo.

Loki: jotun que vivía junto a los dioses. En ocasiones embustero o leal compañero, de naturaleza perversa, por él llegarán todos los males a los dioses y desencadenará el Ragnarök.
Sus principales enemigos (y enemigos de los hombres son):

Fenrir: hijo de Loki. Es un lobo temible, que de cachorro fue el juguete de los dioses en Ásgard hasta que fue demasiado mayor y peligroso para los dioses. Intentaron encadenarlo pero rompió las cadenas. Le ataron mediante una cinta especialmente creada para él a una roca de la que no se puede mover hasta que, llegada la Ragnarok, se libere. Durante la Ragnarok, matará a Odín.

Jörmundgander: la serpiente mundial. Es otro hijo de Loki, enemigo declarado de Thor, quien sujeta el mundo en su torso y se enrolla sobre sí misma devorando su propia cola. En la Ragnarok, Thor matará a la serpiente, y ésta a su vez lo envolverá en vapores venenosos que finalmente acabarán con su vida.

Surt: es el enemigo de Freyr. Por casarse con la hija de Surt, Freyr tuvo que regalarle su espada mágica, que lucha sin que nadie la empuñe. Cuando llegue la Ragnarök, Freyr morirá a manos de Surt. Liquidado su combate, la llama de este gigante de fuego consumirá todo lo existente en el mundo.

reseña sobre los vikingos



Vikingo es el nombre dado a los miembros de un grupo étnico originario de Escandinavia, de los países nórdicos, que vivió entre los años 789 y 1100. Fueron descendientes de un pueblo de origen germánico que se estableció en la península escandinava hacia el año 2000 a. C.

Sus ataques y su aparición en la escena política europea comenzaron con el saqueo del monasterio de Lindisfarne (793) en el norte de Gran Bretaña, al que pronto siguieron ataques a otros monasterios. Los anales y crónicas de los dos siglos siguientes están repletos de relatos aterradores. En grupos más o menos numerosos, los vikingos atacaron con sus barcos las costas europeas, remontaron los ríos de Francia, Alemania y Rusia, conquistaron gran parte del territorio de los pueblos eslavos de la antigua Rusia, las islas británicas Irlanda e Inglaterra y asolaron el Mediterráneo.

Su actuar violento aterrorizó a las antiguas comunidades que, aunque acostumbradas a la guerra, no tenían forma de prever cuándo habría una incursión. Estos ataques influyeron de forma indirecta en la creación de un período de inestabilidad que favoreció la descentralización política del feudalismo.

Durante los siglos siguientes, los vikingos tuvieron gran influencia en la historia europea: en las Islas Británicas gobernaron durante muchos años hasta ser finalmente conquistadas por los normandos, descendientes de vikingos; en Rusia contribuyeron a la formación del estado ruso; en Francia terminaron recibiendo como feudo la región de Normandía; en Italia fundaron el reino normando de Sicilia e incluso llegaron a influir con sus incursiones en el Califato de Córdoba y en el Imperio bizantino.

El último reducto hostil lo representaba el rey Harald el Despiadado, que murió en la Batalla del puente Stamford en el año 1066 cuando intentaba tomar posesión del territorio de Inglaterra.

La Era vikinga terminó en 1100, año en que finalizan las incursiones vikingas.